Cuan desdeñoso es el momento que saboreas y te deja un mal
sabor, un mal pensamiento, un mal estado. Cuan desdeñoso es verte de una forma
y ser totalmente lo contrario. Cuan degradante es el querer algo y frustrarte
al no obtener lo deseado; con todos estos pensamientos me sentía al levantarme
cada mañana y cada noche (que al menos puedo recordar) de esa esquina, oscura,
atrayente y muchas veces hermosa (el saber de ella me guiaba a mi mundo).
Poco recuerdo, poco divago pues sé que no servirá de nada
tratar de recordar, cada parte, cada estrofa, cada metafísica de mi estado,
solo me sirve para simbolizar mi existencia.
La música fluye,
La música te lleva,
Tus letras la guían,
Tu corazón despeja,
Mientras tu mente acepta.
Refundido en el piso de esa borrosa esquina, miro mi
cuerpo pudrirse y siento mi mente trascender.
Refundido en el piso, mi cuerpo se pudre y mi mente trasciende.
Refundido en el piso, mi cuerpo se pudre y mi mente trasciende.