Isha, ish, Isha es el nombre de la diosa que despliega su
magnetismo al son de unos cascabeles. Despierta, acuérdate que ya dejaste la
realidad convencional. Vamos despierta y en tu pestañear deja perpetua tu
voluntad. Así anda, no reniegues de la visión, toma mi mano y deja que el
AmaruÑan nos guie. Algo serio será saber elegir las palabras, pero dejemos que
la luna llena decida que hacer contigo, Isha.
Isha, ondea tu silueta entre mil colores, descarta cada uno
y solo dame el color que necesitemos para recordarnos. De luna negra es el
fondo de tus ojos, de luna llena es el titilar de tu pestañeo.
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