sábado, 24 de septiembre de 2011

Tiempo, Tiempos, Medio tiempo


Tantas ratas habitan la ciudad, prefiero las ratas que la gente.
Desfasa la línea de tiempo de nuevo con resultados demasiado drásticos, no solo se ha marcado el inicio de un nuevo tiempo sino se ha terminado con: “tiempo, tiempos y medio tiempo”. Ya vamos una semana y todo es diferente, la gente ya no está, no se qué hacemos un puñado de personas en este sitio tan extenso como es el centro de esta ciudad.
Las tiendas están intactas pero no hay gente por ningún lado, insisto no pensé que la luna roja la cual precedió esta desaparición fuera tan fuerte como para un cambio tan extenso.
Por cierto acabo de encontrar mi cuerpo en mi apartamento, ya no distingo en que mundo vivo.